Sudadera perruna

Ayer le sorprendí a mi hermano y le regalé una perrita. La que teníamos murió en mayo y desde hace un par de meses, me pedía volver a tener otra ya que yo era la que era un poco reticente. Pero al final, me ablandé y por hacerle feliz me puse a buscar. Al final, gracias a una buenísima amiga encontramos una cachorrita de cocker de un mes y medio super mona así que la fuimos a buscar y nos la trajimos. Ver la cara de mi hermano cuando entré por la puerta y la vio no se me olvidará jamás. Siempre es bonito hacer feliz a alguien, ¿verdad?

En esta esta historia, mi compinche era Conchi, era la única que lo sabía junto con mi amiga, @laytainhe, y con la excusa de que íbamos a tener un nuevo cachorro en nuestras vidas, quiso hacer algo especial. A poco que estéis enterados de la moda, sabréis que este otoño se llevan las sudaderas incluso con looks formales y chic y no tan deportivos. A mí me encantan y durante mucho tiempo han sido parte de mi vestimenta diaria, pero las dejé aparcadas para llevarlas sólo en casa o cuando hacía deporte. Pero ahora de tanto verlas en los escaparates me apetecía tener una nueva así que le pedí a mi madre que me hiciese una ya que llas que veía en las tiendas ninguna me terminaba de gustar. ¿Y cuál sería el motivo para conchimizar la sudadera? Obvio que como estaba en plena vorágine de búsqueda de un perro y como me gustan tanto, unos perretes así que buscamos por internet y encontramos un modelo que nos encantó. Además luego ha dado la casualidad de que son bastante parecidos a la raza de nuestra perrita. Sólo nos quedaba buscar una sudadera lisa, que como podéis imaginar Decathlon fue nuestra opción escogida y las telas. El resultado fue éste: